Estuvimos a un paso de poner el link del video de La Sueca pero contiene
imágenes crudísimas. Iba a ser una locura, de esa carnicería pornográfica no
volvíamos nunca mas. Nos íbamos a ganar el repudio de toda la comunidad
femenina tatengue. Lejos estoy de querer plantear una polémica de género pero
no tengo buenas experiencias con las chicas rojiblancas, recuerdo durante la
presidencia de Don Ángel cuando hacíamos pata ancha en primera división, en Unión
se habían organizado gremialmente creando una “Subcomisión de Damas” encabezada
por una rufiana muy simpática llamada “Marta” que pisaba fuerte en el club. Dicha
comisión gozaba de una especie de inmunidad diplomática a través de la cual se
hacían cargo de la administración de los viajes de visitante. Si querías
acompañar al equipo tenías dos opciones, la primera consistía en ir con “El
Grueso” (nombre técnico con el que se conoce a La Barra de Las Bombas) adentro
de un colectivo Expertur en cuyo interior desfilaban todo tipo de
estupefacientes. Durante el viaje ibas frunciendo el ojete alambrando para que
no te detenga un operativo policial porque una sola inspección de ese ómnibus
servía para tirar toda tu vida sobre la borda. Y la otra opción era recurrir a este
grupo de mujeres que garantizaba cierta tranquilidad en la travesía, en el
primer peaje hasta podías recibir un mate calentito con unos scones. Un domingo
enfrentábamos a Los Andes en cancha de Lanús, el jueves anterior me acerqué al
club y pagué la seña que nos otorgaba el pasaporte hacia una efímera y fugaz
felicidad. El sábado a la noche con los sandwiches ya adentro del tupper se me
ocurre pasar por la Sede y me atiende una Vieja con una libretita quien me comunica
que no habían alcanzado a llenar la segunda traffic, por lo tanto solamente iba
a viajar la cúpula dirigencial de la Subcomisión de Damas en la única traffic
que pudieron completar. Todo esto me lo decía mientras me devolvía mis 50 pesos
de seña y me cerraba una ventanilla en la cara. Terminamos el domingo tirados
en una vereda tomando cerveza con lupines y escuchándolo por radio, que
hermosos eran los torneos donde no te televisaban todos los partidos. Encima
íbamos perdiendo 3 a 0 y metimos 4 goles seguidos, cada alarido de gol de
Ricardo Porta no sabíamos si festejarlo o ir a la casa de una de las Viejas
para quemarle todos los muebles. Nos habíamos perdido una victoria épica. El
último gol lo hizo Zapatita y nuestro DT era el Nery. Dicen que fue clave el
ingreso de Marczuck por Matías Donnet pero no lo pudimos ver porque después el
hijo de puta de Macaya te pasaba 3 horas de River y Boca y a la una de la
mañana cagado de sueño veías una ráfaga de nuestros goles que ni siquiera los
repetían.
Meses mas tarde caímos otra vez en las garras de esas perversas ancianas y
volvimos a contratar sus servicios para un partido que jugábamos en el Nuevo
Gasómetro contra San Lorenzo que se iba a coronar campeón. Esta vez sacaban un
colectivo y teníamos asegurados nuestros lugares. Desde las 8 de la mañana
estuvimos una hora parados en la puerta del club de nuevo con las milanesas
adentro del tuppercito y las malditas víboras no nos habían avisado que salían
desde el estacionamiento de adentro del club. Cuando nos enteramos que ya
habían arrancado, en la desesperación no nos quedó otra que pactar con un
cabecilla de El Grueso que a cambio de muy poco dinero nos invitó gentilmente a
subir al micro que antes de salir ya tenía una vomitada en todo el pasillo y
una cagada abajo del primer asiento. Por supuesto que ni entramos a la cancha
porque estaban las entradas agotadas, con el partido jugándose La Barra de La
Bomba nos ordenó subir al micro y tomamos un rumbo desconocido. Cuando subimos
a la General Paz, un Gordo con auriculares gritó el descuento de tiro libre de Pomelito
Castillo y brotó un cantito muy emocionante que retumbó adentro de un colectivo
donde el olor a culo ya era nauseabundo. Esa tarde nuestro DT también era el Nery
y la dupla de ataque la formaron Silvera y el Cotuto Parmiggiani. En un momento
salimos abruptamente de la General Paz y nos zambullimos en una villa del
partido de San Martín, recuerdo que mi amigo solamente rogaba que encuentren
nuestros cuerpos porque decía que iba a ser denigrante que nos velen con un
portarretrato apoyado arriba de una corona. Esperamos 20 minutos adentro de una
casilla muy oscura hasta que apareció un tipo con la camiseta de Chacarita y
nos dio pizza a los 52 ocupantes del micro. Fue la cena mas larga de mi vida,
al fin subimos al cole y milagrosamente volvimos a Santa Fe. En el peaje de
Zárate el penetrante olor a meada seca me revolvió el estómago y apoyé mi
frente sobre el frío vidrio buscando conciliar el sueño, y vi como nos pasaba
por al lado el colectivo de la Subcomisión de Damas quienes iban adentro con
unos sahumerios prendidos tomando el té con masitas dulces y jugando un bingo
para amenizar las horas de viaje que les quedaban por delante.
Ya pasaron muchos años, un montón de jugadores e incontables dirigentes.
Uno de nuestro grupo empezó a repuntar lo que nos permite ahora viajar en un
humilde pero confortable coche. Cada viaje buscamos en la banquina que
aparezcan aquellas longevas paradas al lado de un ómnibus echando humo y con
una correa destrozada para saludarlas sacando todos nuestros culos por la
ventanilla.
A esta columna la van a terminar leyendo 3 personas porque les advierto que
voy a empezar a publicar cualquier cosa, no me importa mas nada. La semana que
viene les tenemos preparada una receta paso a paso de ñoquis soufflé de rúcula
que son un pedazo de nube. Sucede que este nefasto presente me ha colocado en
un lugar muy incómodo. Es imposible hacer humor y hablar sobre la actualidad
social y deportiva de nuestra amada institución. La gente está sufriendo
demasiado como para andar haciéndose el chistoso. Pero a no desesperarse
muchachos, como les dije alguna vez, la gloria ya volverá a mostrarnos sus
tetas rosadas y rozagantes. Nosotros conocemos muy bien el camino. Los que
ahora nos ven de rodillas, saben muy bien que volveremos. Porque siempre
volvemos, siempre. Y en el próximo regreso seremos implacables.
Qvuelvanlosvisitantes.
jajaja loco yo hice ese viaje a san lorenzo en el bondi de la barra tambien, recuerdo perfectamente ese par de amigos que iban con la subcomision pero nunca se enteraron que el bondi salia del estacionamiento y quedaron a pata, sin otra alternativa que viajar en el bondi de bienvenido y pochola! $25 salio el viaje, no me olvido mas, y la entrada? la entrada se las damos en la cancha dijo bienvenido, convencidisimo!. Es todo tal cual lo contas, aunque hubo un detalle que omitiste, cuando estabamos en la villa loyola (donde comimos a la noche), recuerdo que uno de uds dos, como para cerrar un viaje ideal, pisó un hermoso sorete que viajo 500 km hasta santa fe jajaja
ResponderEliminarque grosooo que sos loco!!!!!!!!!!
ResponderEliminarAcá nunca dejo mensajes, solamente entro para ver las puteadas que me ponen. Pero leer a un tipo que se acuerda de los detalles de algo que pasó 11 años atrás me puso la piel de pollo. Me hiciste emocionar.
ResponderEliminarEntro para cagarme de risa, y no llorar. Espero vivir para ver esto: "Los que ahora nos ven de rodillas, saben muy bien que volveremos. Porque siempre volvemos, siempre. Y en el próximo regreso seremos implacables."
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